
Les voy a hablar de una de mis novelas más queridas. No creo que esta sea considerada la mejor dentro del género, pero la forma y el contenido con la cual esta hecha fácilmente la hace extraordinaria. Tiene todos los elementos necesarios para llegar a cautivarte.
Es la más famosa de las novelas de Jane Austen; se considera como una de las primeras comedias románticas dentro de la historia de la novela, y en una de las obras más conocidas dentro de la literatura inglesa; gracias a sus innumerables ediciones y a las versiones cinematográficas y teatrales que se han realizado.
La trama de la historia tiene todos los elementos necesarios que hacen que el lector se transporte a un mundo lleno de glamour, elegancia, intriga, perjuicios y por supuesto de amor. El tratamiento que le da a la autora hace que las expectativas de lector crezcan a pesar de que esta novela es de hace dos siglos.
Tal como su nombre lo dice Orgullo y Prejuicio, se ve reflejado en los dos personajes principales, Elizabet Bennet y Fitzwilliam Darcy, una relación amorosa en la que los amantes, tozudos y orgullosos, no se declaran hasta que ambos reconocen que se han equivocado, y cada uno a su manera aprenderán que con estos sentimientos lo único que lograron, fueron impedir el amor entre ellos.
La autora escribió esta maravillosa novela en una época llena de cambios tanto en el aspecto educativo como social. Dentro del siglo XVIII existían numerosas “tratados de Conducta” para mujeres jóvenes donde se les enseñaba las doctrinas morales y enfocaban en la educación hacia los aspectos domésticos, la religión y los “talentos”, apartándose así de esos otros conocimientos que provocarían que la mujer fuese poco deseable a los ojos de los hombres.
Justo en uno de los capítulos de la obra hay un párrafo de este tema “me resulta increíble” dice Bingley.. “como todas las jóvenes tienen tanta paciencia como para cultivar todos estos talentos”...
Además Austen creía que el modelo de unos padres ejemplares era incluso más que suficiente para moldear la buena conducta de los hijos, y no cree en la figura de la institutriz y lo refleja cuando Elizabeth la protagonista de Orgullo y Prejuicio dice “no tenemos institutriz, todo lo hacemos por nosotras mismas”. Era evidente que Austen nunca fue ajena a las tendencias de sus obras.
En ese tiempo el modelo de la mujer ideal era alguien que supiera hablar varios idiomas, que supiera de música, de estilo, de varios temas y que tuviera un cierto carisma y expresión.
Al mismo tiempo la escritora plantea el tema de romper con las diferencias de las clases sociales, y lo refleja cuando Elizabeth Benet y su familia pertenecían a una clase social media baja a diferencia de Mr. Darcy , Bingley que eran iconos de la burguesía del momento. Al final estas barreras sociales no son impedimentos concluyendo con el amor entre los protagonistas.
Es una de las novelas más celebradas y conocidas mundialmente de Austen, si bien la novela se escribió en una época tan antigua (Siglo XVIII) es increíble ver que a pesar de los años, esta obra sigue siendo una de las favoritas del público femenino, porque tiene todos los ingredientes necesarios que la hace un éxito mundial: amor, intriga, comedia, y elegancia; además de la sencillez que fue escrita.
La autora nos describe una sociedad llena de prejuicios, donde la diferencia de clases sociales se refleja en los propios protagonistas, que por un momento presos llenos de el orgullo y los prejuicio, verán en peligro su amor.
Creo que el éxito de esta novela está que la historia está escrita y adaptada en un lenguaje tan sencillo, lleno de sinceridad y realismo que hace como dije anteriormente con el paso de los años, una novela muy querida. Y prueba de eso que esta adaptación ha sido llevado con éxito a las pantallas gigantes, claro que nunca se podrá superar al original.
Cabe resaltar que la autora fue alguien que se adelanto a una época, donde el cuestionamiento que hace de la mujer, de la educación, y de la sociedad, no fueron muy bien visto ante los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario